El exsubdirector de la extinta policía secreta de Colombia, José Miguel Narváez, recibió una condena de ocho años de prisión por parte del Juzgado Sexto Penal del Circuito Especializado de Bogotá. La condena fue emitida al haberse comprobado que el ex-funcionario participó de una red de espionaje que perseguía activistas, periodistas y políticos (en especial opositores) durante el gobierno de Álvaro Uribe.
Se comprobó que todos los operativos fueron realizados entre 2004 y 2005, cuando Narváez era subdirector de la DAS (Departamento Administrativo de Seguridad), la policía secreta que fue clausurada en 2011 luego de haberse comprobado gran cantidad de actos de corrupción. Narváez además está procesado por otros hechos tales como el secuestro de Piedad Córdoba, una ex-congresista, y la muerte del humorista Jaime Garzón y el senador Manuel Cepeda, pero él sigue reclamando su inocencia en estos hechos.
A comienzos del año 2009, la revista Semana denunció que sus comunicaciones fueron interceptadas con avanzados micrófonos telefónicos y que gran cantidad de periodistas, opositores al gobierno de Uribe y defensores de los derechos humanos fueron perseguidos de forma ilegal por la DAS.
El abogado Luis Guillermo Perez, representante de varias personas que reclaman haber sido espiadas, afirmó que el ex-presidente Uribe debe ser investigado también por su relación directa con estos hechos de espionaje. Uribe trató siempre de minimizar las acusaciones sobre la responsabilidad de él y su gobierno en estos casos, argumentando que en caso de que hayan ocurrido fueron total responsabilidad de funcionarios corruptos que trabajaban en el DAS durante su gestión. Otros dos ex-funcionarios de la presidencia de Uribe, Pilar Hurtado y Bernardo Moreno, recibieron en 2015 sentencia por varios hechos de espionaje similares a los que involucraron a Narváez.
Fuente: prensa.com